Boda en Navidad
Si pensamos en invierno nos viene a la cabeza: frio, aire, abrigos, botas, bufandas, guantes, nieves… pero en una boda no pensamos nunca. Y nosotros nos preguntamos ¿Una boda en invierno por qué no?
Las bodas no tienen por qué hacerse solo en verano, cada vez son más las parejas que deciden casarse en otras épocas del año, todos los meses tienen su encanto, y lo más importante es casarse con la persona que amamos rodeados de nuestra gente. ¿Y por qué no casarse en Navidad? Las bodas en navidad cada vez son más demandas, es una época mágica, con muchas luces, colores y muy familiar donde los sueños se hacen realidad.
No a todo el mundo le gusta el calor, el invierno tiene su encanto, es elegante, romántico y podéis tener la suerte de que este todo nevado. La ciudad se ve diferente al igual que el campo con olores y vegetaciones diferentes, las tonalidades del cielo y del entorno con más elegantes y aunque haga frio podéis tener una boda espectacular.
Lo sabemos hace frío, pero no es tan malo no os vais a casar en plena calle. Pensar en lo positivo, en los complementos que podéis lucir: abrigos, capas, estolas, guantes, botas, tocas… Solo tenemos que dejar volar la imaginación un poquito y nos daremos cuenta de las infinitas posibilidades que tenemos a nuestro alcance para tener una boda mucho más sorprendente que en verano. Las bodas de invierno están abiertas a cualquier idea, es una opción diferente y original. Lo primero en lo que pensamos es en muchas velas por todas partes que aportan un punto mágico, romántico y único. Seguro que al pensar en una boda en navidad lo primero en lo que pensáis es en muérdago, y en los colores rojos y verdes, una decoración muy literal, pero no hace falte poner nada de esos tonos tan típicos si no os gustan, podemos extraer la magia de estas fechas y reinventarla. Puede ser todo más sutil, con dorados y blancos, con texturas que imiten la nieve, utilizar madera, piñas… Imaginar telas blancas, velas, y dorado, una combinación muy elegante.
Otra cosa que se piensa cuando se decide hacer una boda en invierno o en Navidad es en vuestros invitados, que no van a poder lucir modelito, que van a pasar frio… les dais la excusa para comprase un modelito nuevo, o un abrigo bonito. Tranquilos, ellos disfrutaran de la boda igual o más que si fuera en verano, ya que no se esperan una boda en esos meses. Y una fiesta siempre es bien recibida. Si todavía tenéis dudas os ponemos algunas fotos